Empieza el año 2015. El sexto año de estancia en Vietnam....¡y lo que te rondaré morena! Vinh Yen Vinh Phuc ya es el lugar en el que he vivido más tiempo, después de Colmenar City.
Pero en estos cinco años todavía no había visitado Hoi An. Así que este pasado año nuevo agarramos el petate toda la familia y nos fuimos para allá, a comprobar in situ si era verdad tantas buenas cosas que habíamos escuchado... y en verdad que lo eran.
Sin duda el casco antiguo de Hoi An es lo más interesante que he visitado y, seguramente, lo más bonito de Vietnam hecho por el hombre, porque nada, absolutamente nada, puede compararse a la bahía de Ha Long y a su versión fluvial Tam Coc.
En una cultura que tradicionalmente no presta mucha atención a lo antiguo, salvo que sean personas, donde se tiende a tirar lo "viejo" y hacerlo nuevo y que, además en el caso de Vietnam, ha sufrido guerras devastadoras de manera continuada durante más de 35 años, encontrarse con un casco antiguo intacto y bien conservado es una sorpresa.
Hoi An está en el centro del país cerca de Da Nang, la ciudad más importante de la zona, donde hay un aeropuerto internacional. Cerca de Da Nang está Hué, ciudad de la que ya hablé en una entrada del blog anterior y las ruinas Champa de My Son. Además Da Nang tiene una playa magnífica, My Khe , más conocida como China Beach, nombre que le dieron los soldados estadounidenses que combatieron en la guerra del Vietnam (o guerra americana como la llaman aquí), porque aquí estaba el lugar de descanso de las tropas. Como es fácil de imaginar Da Nang y sus alrededores son un lugar de obligada visita en una ruta por Vietnam, y entre todos los lugares, Hoi An es el más importante.
Para llegar a Hoi An lo normal es ir en avión a Danang desde Hanoi o HCMC y desde el aeropuerto tomar un minibús, que está perfectamente señalizado. Como son solo treinta kilómetros, el taxi también es una buena opción, porque el trayecto cuesta menos de 20 €.
Hoi An es Patrimonio de la Humanidad, y lo que ofrece es un centro histórico intacto, sin coches ni motos, algo que se agradece infinitamente en Vietnam, a orillas del río Thu Bon. Las casas son de estilo tradicional o colonial. No son espectaculares, quiero decir, no son grandes palacios, pero si son antiguas y forman un conjunto armonioso. Son casas de comerciantes, ocupación tradicional en Hoi An, y por supuesto ahora siguen comerciando, con los turistas, por supuesto, pero comerciando.
Sin duda hay quien dice que está masificado y que es un parque temático, como otros muchos lugares. Esta es una discusión interesante.s. En mi opinión, la pretensión de que a los sitios bonitos puedan ir solo unos cuantos elegidos, entre los que, por supuesto, está el que sustenta esa opinión, es profundamente injusta. Por otro lado, no cabe duda que el turismo genera una actividad económica que, si es bien gestionada, como parece el caso de Hoi An, permite mantener esos lugares tal como están ahora. En Hoi An hay muchos turistas y los comercios están enfocados a ellos, pero creo que sus habitantes mantienen un espíritu o ambiente "autentico" o como queramos llamarlo, porque, primero, los habitantes de Hoi An se han dedicado tradicionalmente al comercio y es lo que siguen haciendo y, segundo, son encantadores, mucho más que en otras zonas de Vietnam, y no tienes esa sensación de otros lugares de "vamos a exprimir al turista todo lo que podamos porque, total, no va a volver". No son así. Tuvimos ocasión de comprobarlo varias veces y quiero dejar constancia de ello.
Además de las calles, especialmente las de la ribera del río, Hoi An tiene 22 lugares que se pueden visitar: templos, pagodas, casa comunales y casas privadas. Para visitarlas hay que comprar una entrada en unos puestos de venta que hay en las calles principales de acceso al casco antiguo, que vale 120.000 dongs,5 euros, y que te da derecho a visitar, imagino que durante un día, 5 de esos veintidós lugares. El más famoso de todos es el puente japonés, que por cierto, es en parte gratuito; solo hay que pagar para ver la casa adosada al puente, pero el puente en si se puede ver desde fuera, naturalmente, y cruzar.
Otra de las atracciones de Hoi An es la comida. Abundan los restaurantes de todo tipo, desde elegantes en casa coloniales en la ribera del río, hasta comida callejera en chiquitisillas...algunas también a la ribera del río, muy recomendables. Y hasta un primo mio tiene un restaurante:
Como digo hay muchas opciones, pero quisiera recomendar uno de comida callejera, que está en un callejón, ni siquiera en el centro, pero sin duda la comida es peculiar y, además, no hay que preocuparse por que pedir o si te entenderán, porque el menú es único. Te sientas, te traen unos cuantos platos, te enseñan como se deben de comer, haciendo rollitos y mojandolos en una salsa y te los comes....todo muy sencillo. El nombre del sitio es "Ba Le well", porque está cerca de un pozo que se llama Ba La, que es una de las muchas reliquias de Hoi An. Como digo está en un callejón. Lo mejor es seguir un cartel que hay en la calle Trang Hun Dao cerca de la esquina con Le Loi. Primero está el cartel del pozo, no confundir, hay que seguir un poco más y se llega al restaurante, que como digo es casi comida callejera. Que nadie se espere lujos porque no los hay, es un sitio popular con comida tradicional, los dos, bebida incluida, 10 euros.
Además, como en casi todos los sitios de Vietnam, se encargan de la niña mientras comemos.
Una última cosa de Hoi An. Siempre que digo que soy español me hablan de fútbol, especialmente del Barça y el Madrid, de Messi y Cristiano Ronaldo. En una tienda muy pequeña de figuras de piedra, en la calle Trang Hun Dao, enfrente del hotel Historic, el dependiente menciono a ... no, no mencionó al Atleti como imagináis, cosa que sin duda también me hubiera sorprendido, me dijo en inglés:
"Español, me gusta mucho España, he leído mucho a Lope de Vega y a Miguel de Unamuno"
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