Cimbrel Atlético de Hanoi

Aventuras de un socio del Atleti, colmenareño y naviego en extremo Oriente

martes, 21 de agosto de 2012

Viernes de Remedios

Ya estamos casi en Viernes de Remedios, como quien dice, así que un servidor de Ustedes y su señora esposa se van para España. Nos vemos por allí.

Por cierto, el lunes de Remedios, cocido de solteros lugar habitual, menú habitual y presencia habitual, a pesar de mi nuevo estado social.

Por si había alguna duda.


jueves, 16 de agosto de 2012

Tolerancia

No se si todos sabeís que hace unos cuantos años, mientras estaba en el Departamento Internacional de Getinsa, viajé con cierta frecuencia a Costa Rica, donde teníamos un proyecto de Supervisión de una carretera, como siempre carretera fronteriza, en este caso con Panamá y, por tanto, bien lejos de la capital.

Ayudé a los ingenieros que estaban allí y sustituí durante una temporada al ingeniero residente, que sufrió un accidente, bueno, le atacaron unos perros mientras corría por la playa... yo tengo claro desde hace mucho tiempo que correr es malo.

El caso es que Costa Rica me gustó mucho. El país es tranquilo, sobre todo en comparación con Guatemala y protege el medio ambiente, son famosos sus parques nacionales.

Sigo en contacto con gente de allí. Hace un par de semanas el Atlético de Madrid fue a jugar  un amistoso a San José. Mi amigo Jorge Castro me avisó de que iba a ir a ver el partido, enfundado con una camiseta que hicimos cuando la Peña Atlética Remedios fue a ver jugar al Atleti a Soria (¿no es así Carlitos?) y que le regalamos. Le pedí que me mandara una foto del partido, y lo ha hecho, y la quiero subir al blog porque me parece impensable en España...





Una muestra de la tolerancia Costarricense y porqué de mayor quiero trabajar allí otra vez


PD.- Ma ñana es 17 de agosto... Yo no debería estar aquí

miércoles, 15 de agosto de 2012

VIENDO LAS OLIMPIADAS


Ya se han acabado las Olimpiadas de Londres 2012. Ahora me alegro de que no hayan sido en Madrid porque me hubiera dado mucha rabia haber estado aquí. Siempre me han gustado porque dan la oportunidad de ver otros deportes que no son futbol, y que son muy emocionantes, si hay algún español compitiendo y lo hace medianamente bien. Además siempre me recuerdan la semana del 1 al 8 de agosto de 1992 que Mariano, Pili y yo pasamos en las Olimpiadas de Barcelona.

Ver las Olimpiadas en Vietnam ha sido complicado, más bien imposible. El primer impedimento ha sido el horario. Las competiciones buenas de las Olimpiadas son en horario de tarde, tarde en Londres, madrugada en Vietnam. Imposible ver atletismo, natación o gimnasia. Las competiciones de la mañana, no son tan interesantes, al menos para nosotros, pero…esto es Asia, las retransmisiones, por supuesto, están ajustadas a los gustos asiáticos, así que no os podéis imaginar la cantidad de horas de partidos de Bádminton y Pimpón que han televisado. El torneo completo, a todas horas, y en los dos canales que retransmitían los juegos. También les gusta mucho el tiro con arco…




De todas formas, el primer domingo de competición, a una hora razonable, fue la prueba de ciclismo. El anterior oro olímpico era español, los ciclistas españoles siempre son favoritos y además, durante la carrera se produjo una escapada de 23 corredores en la que había tres españoles. Me dispuse a ver el final. Durante una hora, más o menos, estuvieron retransmitiendo la carrera, pero cuando quedaban 7 kilómetros para el final, los gustos asiáticos se impusieron. ¿Cuántos chinos, coreanos o japoneses son buenos en ciclismo? Creo que ninguno, pero en lo que son realmente son buenos es en halterofilia femenina…. Así que, para mi desesperación, en vez del final de la carrera de ciclismo, que habían estado retransmitiendo durante una hora, ESPN Asia retransmitió los últimos levantamientos de la prueba de 48 kilos de¡¡¡¡¡¡¡¡ halterofilia femenina!!!!!!

¡Qué emocionante!

Aquí os dejo unas fotos del apasionante evento, ganado por una china, segunda una japonesa y tercera una coreana del norte…




El último día, gracias a la ceremonia de clausura, la final de baloncesto fue a las 9 de la noche, hora vietnamita. Buena hora. Nos dispusimos a ver el partido bien pertrechados de comida nacional y convenientemente ataviados, por lo menos Huòng y yo…esperando el milagro. 




Al final no se dio, pero lo pasamos muy bien. El partido fue realmente emocionante. Lástima de los primeros tres minutos del último cuarto…Me voy a empezar a preparar para los juegos de Río de Janeiro…quizá un trabajo en Costa Rica ayudaría.

domingo, 5 de agosto de 2012

EL CASADO CASA QUIERE


Eso dice el refrán popular que me recordó mi amiga Mª Luz, el casado quiere casa, y nosotros por fin nos hemos mudado a una casa. Ya era hora después de cuatro meses de casados. Y no es que los compañeros de la antigua casa se portaran mal, no, que son todos muy apañados, cada uno en su especialidad, eso sí, sino que la situación de recién casado viviendo en una casa con otros tres tíos, por muy majos que sean, no la terminaba de ver como ideal.

Pero al fin hemos encontrado una casa, o mejor dicho, un apartamento, en el Viet Duc Financial Building de Vinh Yen, o lo que es lo mismo, en el Edificio Financiero Vietnamita Alemán de Vinh Yen.



Como podéis ver está nuevo de paquete y tiene un banco en los bajos. Me gustaría decir que el edificio aúna lo mejor de los dos mundos, Vietnam y Alemania, Oriente y Occidente…pero no es para tanto. Eso sí, está muy bien, sobre todo el precio, que es Vietnamita, ¡ah! Y en la octava planta tiene un bar. Eso no lo he tenido en ninguna de las casas en las que he vivido. En Carballiño tenía un gimnasio y en Navia tengo una tienda de tatuajes… pero un bar en la azotea, no está mal.

El piso está muy bien situado. Enfrente tengo el Soiva Plaza, donde hay un supermercado bastante grande, en el que me cobran lo mismo que a los Vietnamitas, porque las cajas funcionan con código de barras, claro. Detrás del centro comercial se ven las montañas del parque nacional de Tam Dao, donde trabaja Huóng. Está tres kilómetros más lejos del trabajo, cinco minutos más en mi Honda Wave


El lugar también es seguro. En realidad Vietnam es seguro, pero este área más si cabe porque, aparte del Banco que tiene seguridad 24 horas ( el edificio también la tiene), estamos enfrente del cuartel de la policía de la provincia de Vinh Phuc


Cómo podéis ver, aquí no se andan con naderías cuando de edificios oficiales se trata.
Bueno, a lo que iba, el apartamento tiene 130 m2 y nos lo han dado vacío (por el precio no se podría esperar otra cosa), salvo el aire acondicionado y un calentador que hemos tardado una semana de duchas de agua fría en saber cómo funciona.

Ya tenemos lo principal del mobiliario: la cocina, que hemos arreglado con carpintería de aluminio y una encimera de granito, la habitación, aunque todavía sin armario y la lavadora. Nos queda el salón, aunque tenemos una televisión, eso sí, en el suelo, y el armario para la ropa, que está todavía en las maletas y cajas. Por cierto, es increíble cuantas cosas se pueden acumular en una sola habitación. Tuvimos que alquilar un camión pequeño, por 8 euros i, para hacer la mudanza.

Aquí tenéis una foto de la cocina:


Y esta del sistema vietnamita de somieres de “lamas”:



Son listones de madera, rígidos, sobre los que se pone un “colchón” de unos 10 cms de espesor, o una esterilla de bambú. Yo he comprado un colchón, un lujo, pero es que voy para mayor.

Nos hemos venido con todos nuestros bichos y plantas, los periquitos y los bonsáis, que me tienen fascinado:




Por supuesto nuestra casa sí que tiene lo mejor de nuestros dos mundos, Vietnam y España.  Aparte de Huòng, que es de largo lo mejor de Vietnam, tenemos nuestras cenas, de comida fusión por supuesto:
Pho Vietnamita de primero y de segundo merluza, o algo similar, a la romana.

El miércoles que Huòng no trabajó, la cena fue totalmente vietnamita:



Bueno, pues eso, que estáis todos invitados a probar nuestra comida fusión en Vinh Yen Vinh Phuc, e incluso a dormir, de momento en el suelo, pero un poco más adelante en una cama de lamas vietnamitas.